Esta etapa va del año a los tres años de edad. Las cantidades de comida dependerán del gasto de energía y del peso, pero su régimen de comidas tiene que ser variado, sencillo y natural, adaptándose progresivamente a la comida diaria del resto de la familia, con algunas modificaciones en cuanto a su presentación: partir muy menudos todos los alimentos sólidos y evitar añadirles salsas fuertes, especias o sal.